El dinero como medio de intercambio de bienes y servicios no siempre existió tal y como lo conocemos hoy. La palabra “dinero” proviene de la etimología “denarius” o “denario” de la moneda romana. En tiempos remotos no existía el dinero por lo que tendían a realizar trueques e intercambios de bienes para sufragar los bienes o servicios obtenidos de otros. Es decir, intercambiaban toda clase de cosas, fuera ganado, frutas, viandas, metales, prendas, u otra clase de objetos, por todo aquello que llenara su necesidad. Con el tiempo surge el dinero para brindar un sistema que se pudiera contar su valor de forma más específica e individual. Fue en el siglo VII a.C. que se comenzaron a acuñar las primeras monedas en Lidia (Hoy Turquía). Fueron ellos quienes comenzaron a usar monedas de oro y plata y fueron ellos quienes establecieron tiendas de cambio en locales permanentes. Durante el reinado de Giges se vieron las primeras monedas con ilustraciones. Poseían la estampa de un león y se usaban para pagarle a la milicia. El hombre buscó un sistema que sirviera de intercambio, que fuera contable y que conservara el valor. El dinero tal y como lo conocemos hoy tiene sus límites que varían de país en país a causa de la diversidad de monedas. Los gobiernos buscaron la manera de crear billetes para brindar un sistema de valor respaldado en oro que sirviera de intercambio de bienes o servicios. Ya en el siglo XIX se intercalaba entre el oro y el papel moneda. En el siglo XX se suspende la convertibilidad del dólar en oro para el público sin embargo, la vigencia del dinero y su valor se mantiene en la creencia subjetiva de que será aceptado por los demás habitantes de un país como forma de intercambio. Los gobierno crean el dinero y el mismo debe ser respaldado en valor interno sea de oro o producto de un país. Son los bancos centrales los que se encargan de crear el dinero y legalizar su uso. El dinero que usted posee en los bancos en realidad se trata de un dinero que está circulando y se trata de una deuda que el banco posee con usted. El dinero que aparece en su balance o cuenta se mueve en todas direcciones, sin embargo, usted conserva su derecho de reclamarlo en cualquier momento cuando hace un retiro por medio del banco. El riesgo de este sistema consiste en el miedo a que todas las personas que poseen dinero en el banco retiren todo el dinero a la misma vez, si esto sucede el banco caería en quiebra. De esta forma, el banco existe porque usted pone su dinero en él. Los bancos centrales no pueden crear billetes sin control o sin freno ya que el valor del dinero tiene que poseer un respaldo por el país.
El dinero puede ser útil, pero poseerlo no garantiza felicidad. Algunos afirman que poseer dinero es ser libre, otros ven el dinero como la forma más útil para esclavizar al mundo.
Algo sí es seguro, la gente más rica es aquella que menos dinero necesita para ser feliz.
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